¿Es posible que un noviazgo funcione de manera parecida a un equipo de fútbol? El trabajo en equipo debe ser parte de las relaciones de pareja. Por ello, en este artículo se describen conceptos importantes sobre el trabajo en equipo, para que sea posible lograr esta sinergia en una relación amorosa.
Trabajar en equipo y conseguir la sinergia en pareja no es un trabajo sencillo, muchas veces las personas desconocen lo que quieren para sí mismas y en ese desconocimiento tienden a buscar en otros algo que les proporcione respuesta a lo que no encuentran dentro de sí mismas.
Es por esta razón que para muchas parejas es mucho más sencillo terminar la relación que aprender a trabajar en equipo, porque puede suceder que con el paso del tiempo las características que maravillaban acerca del otro, empiezan a mermar y se comienzan a notar las diferencias, o todo aquello que no es tan afín para los dos. En este punto, cuando las personas ya no consiguen tanta concordancia, pueden sentir que es más fácil terminar la relación y encontrar a otra persona con mayores coincidencias, es decir, una persona con la que no se tenga que hacer el trabajo de llegar a acuerdos.
Pero, ¿qué pasa cuando terminar no es la solución para todo? ¿Qué se puede hacer cuando se quiere aprender a generar cambios o transformaciones para hacer funcionar los objetivos dentro de la relación? Alinearse en pareja y trabajar para lograr apoyo o contribución, es un trabajo que se inicia con la comunicación. La comunicación es el punto de partida para alcanzar el tan anhelado trabajo en equipo, ya que sin ella es imposible externar las expectativas, deseos o metas que se tienen de forma particular.
El trabajo en equipo es posible cuando dos o más personas se organizan y establecen acuerdos o planes para realizar una actividad o trabajo específico. En el caso de las relaciones, el trabajo en equipo debe darse para el logro de las metas en común, es decir, el núcleo como pareja. Y para ello, es necesario tener claro el concepto de individualidad.
La individualidad engloba al conjunto de gustos, ideas, metas, formación familiar y objetivos que se traza una persona para sí misma. Son todos los aspectos propios y característicos de un ser, que lo diferencian de los demás; dentro de estos aspectos, también entran sus creencias y costumbres. Aunque se esté en pareja, la individualidad no se puede perder porque con el tiempo, perder la individualidad puede derivar en cansancio, disgustos o conflictos.
Para balancear la individualidad con la relación de pareja, es necesario apoyarse en dos características del amor: la comunicación y la comprensión. Sin comunicación ni comprensión no es posible dejar espacio para que cada quien exprese su ser individual. Por su parte, para conseguir trabajar en equipo se deben tener dos elementos claros y explícitos:
1- Definir quién es cada quién y qué quiere cada uno (¿qué los diferencia?)
2-Establecer puntos en común, identificar los valores que fundamentan la relación (¿qué los une?)
Ambos elementos mencionados anteriormente, demandan vivir estando en consciencia del otro, es decir, saber por qué se está con la pareja, y hacia dónde se quiere llegar con ella. Cuando las dos personas tienen claras estas ideas a nivel personal, se hace más fácil alcanzar lo que se conoce como sinergia.
La sinergia es un estado de alta energía que se deriva de la experiencia de alcanzar metas en común. Por ejemplo, cuando un equipo de fútbol está en la cancha desempeñando sus roles, cada uno de forma individual está liberando energía alta de enfoque, concentración y disfrute de lo que está haciendo, es decir, el aporte y el esfuerzo que cada jugador está haciendo para anotar un gol. En el caso de las relaciones sucede lo mismo, se crea una sincronicidad gracias a la experiencia de contribución y apoyo, porque se reconoce que los esfuerzos hacia la meta están multiplicados y no son responsabilidad aislada de uno solo.
Cuando te encuentres en experiencia de diferencias o de desacuerdos con tu pareja, intenta pensar desde la perspectiva de un equipo, para descubrir si es posible establecer un plan o acuerdos que ayuden a ambos a superar la experiencia de duda o dualidad. Recuerda que, al igual que en el fútbol, en las relaciones se presentan obstáculos y retos que vienen a ser oportunidades para crecer y trabajar en equipo.